Sábado, 08 de Abril de 2017 (parte 3)


Sentados en los sofás del palacio de los Yusupov, debatimos sobre si ir al monasterio de Smolny: hay que caminar un rato y coger después un bus que tarda casi cuarto de hora en llegar a un punto cercano al monasterio (otros 5 minutos caminando después). Verlo por fuera, porque no se puede entrar según hemos leído, y luego volver al “centro” para comer.

Avenida Nevsky
Un escaparate en la avenida Nevsky

Decidimos por tanto prescindir del monasterio e irnos andando a una zona comercial, Sennaya, donde dicen que hay mercadillos, tiendas más baratas que en Nevsky, centros comerciales y muchos restaurantes donde comer.

No encontramos nada de esto; bueno, sí, un centro comercial al que entramos y volvemos a salir porque no había casi nada ni casi nadie.

Reorganizamos planing de nuevo, batiendo récords, 2 veces en treinta minutos… y optamos por comer por la avenida Nevsky y visitar el museo Fabergé.

Da la casualidad de que en esta plaza se encuentra la estación de metro del atentado de hace unos días, y también da la casualidad de que si queremos llegar a Nevsky, tenemos que coger la misma línea de metro del atentado. Pero, como ya comprobamos ayer, la normalidad se ha impuesto rápidamente y el metro funciona puntual y va lleno de gente. Lo único que encontramos es un memorial improvisado con ramos de flores a la entrada de la estación.


Memorial atentado San Petersburgo

Comemos en la famosa (en San Petersburgo al menos) cadena de restaurantes Tepemok. La comida son crepes rellenas de lo que quieras (bueno, y ofrezcan). Elegimos dos crepes de pollo con champiñones y queso una, y queso, tomate y cebolla la otra; una ensalada a compartir, otra crepe de postres de manzana y caramelo, agua y cerveza por 1100 rublos. No os emocionéis pidiendo: tuvimos que pedir que la de manzana y caramelo nos la pusieran en una bandejita para llevar (tienen servicio de take away, y carta en inglés).

Tepemok San Petersburgo


Cuando llegamos al museo Fabergé, a 5 minutos, nos encontramos con una cola enorme de gente para entrar. Pregunto que para qué es, si es el acceso normal, pero nadie habla inglés, así que con resignación nos colocamos al final de la  fila, donde hago un exitoso último intento por enterarme de si esto es “normal”.

“Oh yes, there is a déli exhibition”. “Una exposición de qué?”. “Dáli, the spanish artist”. Anda la leche. Una exposición de Dalí, sólo por un mes, con obras traídas de Figueres específicamente para esta muestra. ¡Y por eso hay tanta expectación y una cola tan larga!.


Cola entrada Faberge


Pues… no. Fabergé vale, pero a Dalí ya le vimos hace 6 años… Se avecina nuevo cambio de planes.


Exposición Faberge Dali


Que al final, no es tal. Vamos hasta el apartamento, donde nos dividimos. Yo me voy al Almirantazgo a hacer una foto, aprovechando que ha salido el sol.


Almirantazgo San Petersburgo

Y de ahí al Neva, al muelle de donde salen los hidrofoil a Peterhof (donde iremos mañana). Pero dichos muelles no existen… pregunto en información y turismo, que está en la plaza del Hermitage y efectivamente, hasta finales de abril no montan los muelles ni comienzan a funcionar.

Fortaleza de Pedro y Pablo
No hay muelle... así que saco foto a la Fortaleza de Pedro y Pablo desde el otro lado

Ya que estoy, hago unas fotos al Hermitage desde fuera y me vuelvo al apartamento.

Plaza Hermitage

Por cierto, que he encontrado un cajero en ruso e inglés simultáneo, del que he sacado dinero con la tarjeta EVO, a 59'25. Ronda los 60 rublos por euro a día de hoy, así que no está mal.

Ya sabes. Si te está gustando....


Aaaaah, ya he desvelado el enigma del tremendo ruido que hacen los coches por el asfalto. Son las ruedas!!! Especiales para nieve y hielo... estuve preguntando y en verano las cambia todo el mundo.




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